Según el comunicado, actualmente están intentando «limpiar» las afueras del norte de la ciudad de Vovchansk, situada cerca de la frontera.
También estallaron enfrentamientos en la localidad de Starica, situada a unos 30 kilómetros al oeste de la ciudad. El Estado Mayor escribió que «las pérdidas totales del enemigo son 106 hombres más 25 armas y equipo militar».
Según el informe, los rusos lograron un éxito parcial en las proximidades de la aldea de Lukyantsy, situada a unos cuarenta kilómetros al oeste de Vovchansk, pero desde entonces las fuerzas ucranianas han lanzado un contraataque. Durante el día, las fuerzas rusas llevaron a cabo ocho ataques aéreos contra los asentamientos de Ude, Lipce, Hravsky y Vezely, cerca de Vovchansk.
Oleh Szynyhopov, gobernador de la provincia de Kharkiv, dijo a través de la aplicación Telegram que al menos un ciudadano local murió y cuatro resultaron heridos como resultado del bombardeo ruso del lunes. También informó que se emitieron órdenes de evacuación obligatoria para los huérfanos y los niños privados del cuidado de sus padres desde la zona más afectada por los combates. Según sus palabras, hay 113 niños, nueve de los cuales ya han abandonado los pequeños asentamientos alrededor de Vovchansk con sus tutores.
Oleksandr Prokogin, gobernador de la provincia sureña de Kherson, anunció en las redes sociales que las fuerzas rusas bombardearon la aldea de Kizumysh en su distrito durante el día, matando a dos residentes locales.
Fuente de la imagen de portada: Getty Images
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