Cree que además de su trabajo como productor de contenidos, puede encontrar el producto real, incluso si una tercera persona está involucrada en el trabajo.
«Creo que incluso con mi trabajo en Onlyfans, tengo la oportunidad de encontrar a la persona real». el confiesa A Aniko Molnar, que lleva casi un año y medio ganándose la vida cómodamente como productora de contenidos eróticos, le falta una cosa en su vida. Y es amor.
Naji, la ex, reveló hace unos días que el amor volvió a su vida a través de uno de sus viejos conocidos, y aunque su relación comenzó a tomarse en serio, los famosos quedaron decepcionados. Planeaban celebrar el cumpleaños número cuarenta y nueve de Molnar con un romántico viaje a la playa, pero al final no pasó nada, pues la rubia prefirió no ir debido a sus roces con el hombre. Presumiblemente, Molnar aprendió de estas decepciones para saber con certeza qué tipo de pareja quería.
Por supuesto, no pretendo que la situación sea sencilla, pero sigo creyendo que hay alguien en algún lugar del mundo que puede ser mi socio en todo. ¡Sí en todo! Quiero una pareja con la que pueda compartir mi trabajo, es decir, aparecer juntos en sesiones de fotos. Este tipo de producción de contenidos es un trabajo duro, requiere mucho tiempo, hay que generar muchas ideas, gestionar el sitio… Sería más fácil si tuviéramos a alguien con quien gestionar el trabajo. Y por cierto, si trabajara conmigo, no habría cuestión de celos.
– el dijo En cuanto a Ripost, la estrella de OnlyFans, que no quiere encontrar pareja a cualquier precio, se siente cómoda sola. Ahora el trabajo es lo primero.
“Conozco cuatro tipos de hombres: el primero es conservador, leal y nunca engaña a su esposa. En cuanto al segundo tipo, que dice ser conservador pero no vive así, le miente a todo el mundo, especialmente a su familia. hay quienes viven según sus instintos, y dentro de eso hay dos tipos: alguien tiene aventuras sólo con su pareja, y alguien deja entrar a otros a veces. Este último es mi hombre: la persona que estará a mi lado es la persona. con quien formamos una alianza, pero en ocasiones, por cuestión de trabajo, también incluimos a una tercera persona en la producción del contenido.