“Y dirás en tu corazón: 'Mi fuerza y la fuerza de mi mano me han traído esta riqueza. Pero acuérdate de Jehová tu Dios, porque él es quien te fortalece para obtener riquezas..'” (Deuteronomio 8:17 ).
El éxito en repeler el ataque con misiles y drones de Irán ha reavivado el antiguo debate sobre si le debemos el éxito a la ciencia o a Dios. Este debate lo vivimos recientemente durante la pandemia del coronavirus, donde había quienes veían las vacunas y las normas sanitarias como pecados contra Dios, mientras otros creían que la oración era inútil y que sólo la ciencia podía salvarnos.
En Israel, especialmente desde el 7 de octubre, se escuchan a menudo voces que dicen que no hay necesidad de ejército ni de fuerzas de seguridad, que sólo la oración y el estudio de la Torá proporcionan al país la protección adecuada. A esta opinión se oponen quienes consideran que el aprendizaje es absolutamente innecesario y ponen todas sus esperanzas únicamente en el ejército.
En el centro de este debate está la creencia errónea de que los mundos material y espiritual están en conflicto entre sí.
Pero el judaísmo dice que las dos cosas, el mundo material y el espiritual, existen uno al lado del otro, reinan juntos y no pueden separarse el uno del otro.
El pueblo de Israel puede lograr éxito militar y económico porque, por un lado, invierte suficiente tiempo, energía y dinero en el progreso y, por otro, vive su vida cotidiana normal de acuerdo con los valores milenarios entrelazados. Con espiritualidad.
Los dos elementos, el material y el espiritual, no se contradicen, sino todo lo contrario: se complementan. El estudio de la Torá apoya el servicio militar con espiritualidad, mientras que el servicio militar permite el cumplimiento de los valores de la Torá. “Con la ayuda de Dios”, decimos a menudo. Esta afirmación no significa que las cosas no requieran esfuerzo humano, sino más bien que las acciones humanas y la ayuda de Dios juntas conducen al éxito.
¡Con la ayuda de Dios, venceremos juntos!
este condición Publicado originalmente en Zsido.com.
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