Después de retrasar dos años el lanzamiento del gran vehículo recreativo totalmente eléctrico Volvo EX90 debido a dificultades en el desarrollo del software, la compañía ha anunciado ahora otra mala noticia para sus clientes: las entregas de los coches comenzarán, pero algunas funciones electrónicas solo estarán disponibles disponibles en ellos más adelante.
En la era de las actualizaciones de software inalámbricas, esto técnicamente no es un problema. En los últimos años, esto se ha convertido en una de las tendencias de desarrollo más importantes en la industria automotriz, ya que el conocimiento relacionado con los vehículos basados en software puede actualizarse, mejorarse, modificarse y mejorarse cada vez más rápidamente. Al mismo tiempo, hoy en día no es nada común -al menos en la industria automotriz, como es una práctica común para los videojuegos y los productos de tecnología emergente- que un automóvil no reciba los servicios prometidos y solicitados en el momento de la entrega.
Según Jim Rowan, director ejecutivo de Volvo, sus clientes reconocen el potencial de la tecnología de vehículos basada en software y las características de las arquitecturas digitales. «Creo que los clientes que compran productos con tecnología de vanguardia como el EX90 entienden sus detalles y saben cómo les beneficiará a largo plazo», dijo. Noticias de coches en Europa El director de la empresa añadió que, debido a las deficiencias, no hubo mucha reacción entre los clientes.
En el caso del Volvo EX90, la disponibilidad de funciones de seguridad y confort se retrasa. Falta lista completa Publicado en línea Coches Volvo. Entre otras cosas, el software para controlar el radar láser de largo alcance y el sistema LiDAR tampoco funciona, pero los propietarios de iPhone, por ejemplo, tampoco podrán utilizar temporalmente el asistente de voz Siri en el coche. Más adelante también estará disponible una función de conexión a la red, con la que se podrá suministrar a consumidores externos (o incluso a toda la familia) la energía eléctrica almacenada en la batería del coche.
Volvo no es el único fabricante de automóviles que tiene problemas con las tecnologías basadas en software. En otoño de 2020, Volkswagen empezó a ofrecer el hatchback eléctrico ID.3 en Europa sin las mismas funciones básicas. Las deficiencias se subsanaron después de un trimestre.
El Porsche Macan totalmente eléctrico entró en el mercado hace más de dos años a finales de enero pasado, justo cuando se retrasó el lanzamiento del Audi Q6 E-tron. Según los analistas de mercado, el retraso en la disponibilidad del software desarrollado internamente por el Grupo Volkswagen podría haber causado al grupo empresarial una pérdida de hasta 3.000 millones de euros.
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